Mañana bien tempranito me voy ya para Sevilla y pasado , más pronto aun, partimos para Galicia a comenzar el Camino!! Siento no haber escrito antes, quería haber contado muchas cosas en estos días, pero al parecer, cuanto más tiempo libre tengo, menos le dedico ya al blog... ay! Contaros cosas como que el otro día estuve haciendo limpieza en un cajón de mi mesilla (sólo en uno!) y me encontré mil historias olvidadas ya, cartas de amor, fotos de hace años, secretos que ni sabía que tenía ahí metidos y hasta condones de los que regalaba cruz roja juventud y que soñaba con usar algún día... contaros que en ese cajón me reencontré con una yo de otros tiempos y me sorprendió bastante descubrir que me he olvidado de muchas cosas. Ese mismo día, después de organizar el cajón y reesconder fotos y escritos de mi puño y letra que sigo queriendo que nadie me encuentre pero que no soy capaz de tirar, discutí con mi padre comiendo como hacía cuando tenía quince años y le contesté hasta que ya mi voz no podía y tuve que dejar de comer y subirme a mi cuarto y esconderme en mi mundo... y volví a encontrarme a esa adolescente que tantas veces se topó con la barrera del cerebro de papá y subía las escaleras llorando y pegaba un portazo que sabía que lo cabrearía más todavía. Pero ya no lloré. Y es que hace mucho que no pasaba tanto tiempo en casa, y ociosa... y esto tenía que reventar por algún lado.
En estos días, he querido hablaros de mis largos paseos, que se vieron chafados por un ejército de nubes cargaditas de agua que hasta que no han descargado la ultimísima gota no se han ido. Pero hoy ha salido el sol y he dado el último paseo en la mejor compañía del mundo y nos hemos encontrado unos borricos preciosos y tenía yo unas fotos pero que muy hermosas, pero como estoy escribiendo esto metida en la cama, apurando mi último rato de ordenador antes de irme mañana y tengo la cámara ya en la mochila, lista para captar escenarios gallegos... pues no las voy a poner hoy.También puedo contaros que tengo muchas, muchas ganas de comenzar por fin esta nueva aventura, de reencontrarme con las superwomen con quienes tendré el placer de ir, de pisar Galicia y por el caminito dejar mis huellas... como este Camino dejará huella en mí, cosa que no dudo.
Pues eso, que yo me voy, que me marcho, allá voy! Os dejo con los Cantares y os prometo que cuando vuelva contaré cositas de este viaje nuestro y que organizaré el otro cajón de la mesilla, con todo lo que esto conlleve. Un abrazo.
4 que dejaron huella:
Ánimo: al andar se hace camino y al volver la vista atrás, se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar...
(aunque pelearse con los padres sea una senda eterna, que incluso se echa de menos cuando se es viejo).
Buen viaje!!!
dicen que es una experiencia casi mágica hacer el camino de santiago y sobre todo para volver a conocerse a uno mismo u reorganizar la vida.
Espero que para ti también sea algo muy especial.
Unbesazo
allá vamos querida mía!!! hasta el final!
yo dejaré el tema de los cajones para después de la elección de plaza...(sí, yo y mis plazos)
q envidia me dáis!!!!
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